El activista pacifista Mark Colville fue sentenciado el viernes a 21 meses en una prisión federal por su participación en una protesta pacífica contra las armas nucleares estadounidenses. Colville es el último de los integrantes del grupo de activistas por la paz conocido como “los siete Plowshares de Kings Bay” en recibir una sentencia. En 2018, Colville y otros los seis activistas del grupo irrumpieron en la base de submarinos navales de Kings Bay en el estado de Georgia con una acusación formal contra el Gobierno de Estados Unidos por cometer crímenes de lesa humanidad.